Evidencias Arqueológicas Que respaldan la Biblia

Caja de huesos descubierta en 1990 con la inscripción "José, hijo de Caifás", posiblemente el sumo sacerdote que presidió el juicio de Jesús (Mateo 26:57).

Caja de huesos con la inscripción "Jacobo, hijo de José, hermano de Jesús". Aunque hay debate sobre su autenticidad, algunos eruditos la consideran genuina.

Miles de monedas de la época bíblica han sido descubiertas, confirmando los sistemas monetarios mencionados en la Biblia (denarios, dracmas, siclos, etc.). Las monedas también confirman la existencia de reyes y gobernantes mencionados en los textos bíblicos.

La cerámica encontrada en sitios bíblicos confirma los períodos históricos mencionados en la Biblia. Los estilos de cerámica ayudan a fechar los eventos bíblicos y confirman la presencia de culturas específicas en lugares y tiempos mencionados en las Escrituras.

Restos de estructuras mencionadas en la Biblia han sido descubiertos, incluyendo muros, puertas, palacios y templos. Estos hallazgos confirman la descripción bíblica de ciudades y estructuras antiguas.

Fragmentos de papiros y ostraca (fragmentos de cerámica con escritura) han sido descubiertos, algunos mencionando nombres y lugares bíblicos. Estos hallazgos confirman la existencia de personas y lugares mencionados en la Biblia.

Sellos de arcilla (bullas) con nombres bíblicos han sido descubiertos, incluyendo sellos de funcionarios y reyes mencionados en la Biblia. Estos hallazgos confirman la existencia de personas y cargos mencionados en los textos bíblicos.

Inscripción griega descubierta en Betsaida que menciona el nombre de la ciudad, confirmando su existencia en el período del Nuevo Testamento. Betsaida es mencionada múltiples veces en los evangelios como lugar donde Jesús realizó milagros.

La piscina de Siloé, mencionada en Juan 9:7 donde Jesús sanó a un ciego, fue descubierta en 2004 durante excavaciones en Jerusalén. La piscina data del período del Segundo Templo y confirma el relato bíblico.

Restos de la piscina de Betesda, mencionada en Juan 5:2-9 donde Jesús sanó a un paralítico, han sido identificados cerca de la Puerta de las Ovejas en Jerusalén. Las excavaciones han revelado una estructura de dos piscinas con cinco pórticos, tal como describe el evangelio.

Múltiples inscripciones mencionan a Herodes el Grande y sus descendientes, confirmando la existencia histórica de esta dinastía mencionada en los evangelios. Inscripciones en Cesarea Marítima y otros sitios confirman los títulos y cargos de los Herodes.

Fragmentos de cerámica con inscripciones hebreas descubiertos en Arad, una fortaleza del período bíblico. Estos ostraca mencionan nombres y lugares bíblicos, confirmando la existencia de personas y lugares mencionados en las Escrituras.

Cajas de huesos (ossuarios) y tumbas de la época bíblica han sido descubiertas, algunas con inscripciones que mencionan nombres bíblicos. Estos hallazgos confirman prácticas funerarias y nombres mencionados en la Biblia.

Bloques de piedra del Segundo Templo han sido descubiertos, incluyendo una inscripción que advierte a los gentiles que no entren en el área sagrada del templo. Esta inscripción confirma las prácticas del templo mencionadas en Hechos 21:28.